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Cuando tu pareja está lidiando con la depresión, puede ser un desafío para ambos. Por lo tanto, es importante saber cuál es la mejor manera de brindarle tu apoyo en su proceso de recuperación. ¿Cómo puedes saber si tu pareja está deprimida? ¿Qué puedes hacer para ayudarla? ¿Qué decir y qué no decir en estos momentos difíciles?
Aquí, algunos consejos prácticos para navegar esta situación sin palabras complicadas ni formalidades innecesarias.
Presta atención a cambios en su estado de ánimo y comportamiento de la vida cotidiana. Si notas que tu pareja está constantemente triste, desmotivada o irritada, puede ser un signo de depresión. Además, fíjate si ha perdido interés en actividades que solía disfrutar, tiene problemas para dormir o comer, o se muestra distante y poco comunicativa.
Es importante recordar que el diagnóstico de depresión sólo puede ser hecho por un profesional de la salud mental. Además, es necesario diferenciar si se trata de un estado pasajero o de algo que prevalecerá en el tiempo.
No minimices sus sentimientos: Evita restarle importancia a lo que tu pareja está sintiendo. La depresión no es solo una fase pasajera, es una enfermedad que requiere atención y apoyo.
Infórmate sobre la depresión: Educarte sobre esta enfermedad te ayudará a comprender mejor lo que está experimentando tu pareja y cómo puedes ayudarla de manera efectiva. Cada persona sufre la depresión de manera distinta, por lo que aprender de ella te enseñará cómo apoyar a tu pareja.
Ofrece tu apoyo incondicional: Hazle saber que estás ahí para él o ella, incluso en los momentos más difíciles. Los síntomas de la depresión pueden hacerte parecer que le eres indiferente, pero tu presencia y apoyo pueden marcar la diferencia. Muéstrale que puede contar contigo en todo momento, pero respeta su espacio y sus límites.
Escucha activamente: Dale espacio para expresar sus emociones sin juzgar ni interrumpir. A veces, lo único que necesita es que alguien lo escuche y necesita un espacio de confianza y comodidad en donde hacerlo. No intentes solucionar sus problemas, solo sé su apoyo.
Evita poner presión: No le exijas que se sienta mejor de inmediato o que haga cosas que no está preparado para hacer. Sé paciente y comprensivo, es un proceso largo y precipitarnos solo genera más frustración. Y ponte en su lugar: a veces, actividades sencillas como preparar una comida o ir de compras pueden ser todo un reto para una persona con depresión.
Motívalo a buscar ayuda profesional: Anímalo a hablar con un terapeuta o un médico especializado en salud mental, explicándole cómo la terapia lo puede ayudar. La depresión es una psicopatología severa que debe ser trabajada junto a un profesional: no existen los “atajos”.
Cuida de ti mismo: No olvides ocuparte de tu propio bienestar emocional mientras apoyas a tu pareja. Busca apoyo en amigos, familiares o grupos de apoyo si lo necesitas. Es importante que no te culpes por su sufrimiento.
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A veces, las palabras que utilizas pueden llegar a ser contraproducentes.
En vez de decir “te falta fuerza de voluntad” o “eso se te tiene que pasar”, que pueden sonar exigentes y juzgadoras intenta decir frases como “eres fuerte” y “vas a poder con esto”.
También puedes decir frases como «estoy aquí para ti» o «¿cómo puedo ayudarte en este momento?» Ofrecer tu apoyo sin juzgar puede marcar la diferencia.
Recuerda que cada persona y cada relación son únicas, por lo que es importante adaptar estos consejos a tu situación específica. Lo más importante es demostrar amor, comprensión y apoyo incondicional a tu pareja mientras atraviesa este difícil momento.